Si bien recomiendan llevar a cabo esta práctica todas las mañanas, lo cierto es que no siempre tengo ganas o tiempo de hacerlo. Por ello lo realizo 3/4 veces a la semana (mejor eso que nada).
Empecé haciendo oil pulling con aceite de coco. Este aceite es el que más se utiliza ya que es rico en ácido láurico, antivírico y antibacteriano. No obstante hay que tener en cuenta que se vuelve sólido por debajo de los 21ºC y por ello no hay que escupirlo en el desagüe porque podría ocasionar atascos en las tuberías si se solidifica.
También se puede utilizar el aceite de sésamo o de oliva, siempre que sean aceites puros de primera presión en frío.
Pero actualmente y desde hace unos meses yo práctico el oil pulling con el tooth oil de Ringana, porque es una pasada. Este aceite está hecho solo con ingredientes naturales y tiene certificado orgánico. Se trata de una combinación de aceites: aceite de sésamo con aceite de menta, anís, limón y eucalipto, entre otros. También incluye cúrcuma con lo que es un buen anti-inflamatorio (perfecto si tus encías tienden a inflamarse, como es mi caso).
La aplicación es la misma, pongo una cucharadita del aceite en la boca y masajeo. A veces incluso masajeo con el dedo índice las encías (esta práctica proviene también de la medicina Ayurveda).